¿Necesitas una crema regeneradora para cuidar tus tatuajes? Esta es la ideal.
Hidrata, calma y repara la piel sana del tatuaje formando una película fotoprotectora del color frente a las exposiciones solares. Gracias a su fórmula específica, que contiene aceite orgánico de cannabis sativa, pantenol, alantoína, aloe vera y filtros solares, aporta una gran hidratación, favoreciendo la regeneración de los tejidos cutáneos y proporcionando un efecto calmante que alivia y ofrece una sensación de frescor y bienestar a la piel.
También está indicada para calmar las pieles irritadas y enrojecidas e incluso para después de tratamientos estéticos abrasivos como láser, peelings o depilaciones.
Ingredientes:
- Aceite de cáñamo: Se obtiene por primera presión en frío de las semillas de la planta Cannabis Sativa. Sus propiedades son realmente efectivas para la belleza y la salud de la piel. *No contiene THC, sustancia psicoactiva que se encuentra en la resina de la marihuana por lo que no tiene ningún efecto secundario.
- Pantenol: Provitamina B5. Tiene gran capacidad de penetración en la piel y un poder humectante. Ideal para aplicar como un after-sun y en irritaciones suaves de la piel.
- Alantoína: Sustancia química que se encuentra en algunas plantas medicinales. Cuatro de los efectos más destacables:
1. Permite reducir el tiempo de cicatrización cutánea y fomentar así su regeneración, ya que favorece y acelera este proceso natural de la piel.
2. Cuando hay tejido cutáneo en mal estado, la alantoína destruye la piel muerta permitiendo la limpieza y mejora de la piel dañada; y así impide la acumulación de materia fácil de contaminar por bacterias.
3. Estimula la epidermis, concretamente el epitelio granuloso, la zona en la que se generan las nuevas células que reemplazarán a aquellas que están dañadas o envejecidas.
4. Reduce la sensación de dolor, actuando así como un anestésico suave. Se utiliza frecuentemente para tratar las pieles secas, pero también puede usarse como antiséptico y humectante junto con otras sustancias de propiedades similares. El resultado es una piel más tersa, sana y saludable.
- Aloe vera: Todos sabemos que el Aloe Vera tiene diferentes beneficios (pendiendo del tipo de piel sobre el que se aplique):
Hidratante: Gracias a su riqueza en mucílagos, el Aloe Vera tiene una gran capacidad para retener agua, por lo que resulta muy eficaz en el tratamiento de pieles deshidratadas.
Además penetra profundamente en las capas de la piel y eliminar las bacterias y los depósitos de grasa que tapan los poros. Al mismo tiempo, la acción de los nutrientes naturales del Aloe Vera, los minerales, las vitaminas y los aminoácidos estimulan la reproducción de nuevas células.
Permite que el agua y los otros agentes hidratantes se introduzcan en la piel retirando las toxinas y permitiendo que las propiedades astringentes actúen con más eficacia. Esta capacidad de penetración ayuda a evitar que se obstruyan los poros de la piel del rostro y le proporciona un brillo saludable porque la actividad enzimática de la planta acelera la circulación de la sangre y desprende las células muertas.
Es antialérgico, calmante y antiinflamatorio: Resulta muy útil en las pieles atópicas, con tendencia a la alergia.
Desinfectante: Su reconocida actividad frente a determinados virus y bacterias de la piel lo hace ideal a fin de combatir la presencia de los microorganismos que ayudan a la formación de molestos granos e impurezas en la piel.
Estimulante y regeneradora: Los aminoácidos, las vitaminas y los minerales que contiene el Aloe Vera lo hacen muy efectivo para combatir las pieles desvitalizadas y dañadas.
Gatuline A (Gattefossé): Extracto en polvo obtenido de la Ficaria Ranunculoide especialmente diseñado para el tratamiento de pieles sensibles y frágiles. Efecto antiinflamatorio, anticuperósico y descongestivo.
Vitamina E: Antioxidante que ayuda a proteger la piel ante las agresiones ocasionadas por los factores medioambientales. Protege la epidermis, regenera las fibras decolágeno y suaviza la superficie de la piel.
¿Cómo se utiliza?
Aplicar cada día sobre la zona del tatuaje previamente limpia y seca, dejando una suave película de crema para su protección. Imprescindible en las exposiciones al sol. El uso habitual del producto mantiene la piel suave e hidratada, los pigmentos brillantes y el tatuaje definido.